Lectura libre - Guía de Maternidad
Una guía de maternidad y crianza

Lectura libre

¿Cómo se relacionan el movimiento libre y el juego libre con el acercamiento a la lectura?

Me gusta llamarle lectura libre al acercamiento con el libro que se puede dar en un espacio de juego, seguro y cuidado, pensado para el desarrollo y despliegue de las habilidades de niños y niñas. 

Emmi Pikler es una pediatra húngara que, a través del concepto de movimiento libre, defiende que los bebés deben moverse libremente de forma que no se les coloque en ninguna posición a la que no puedan llegar por ellos mismos. Nos invita a confiar en la capacidad innata de los bebés, a cambiar la perspectiva, a tener paciencia, a confiar en nuestros bebés y en sus capacidades.

El juego libre pone en práctica el principio pikleriano del valor de la actividad autónoma del niño, al no intervenir directamente ni en su movimiento, ni en su juego. Este tipo de juego se caracteriza porque es el bebé quien guía el juego. El juego espontáneo es la principal fuente de aprendizaje de los niños y niñas, es una necesidad básica e instintiva  que es indispensable para que se desarrollen de manera saludable. 

He presenciado esos momentos hermosos de lectura libre en salas de centros educativos y en espacios de juego libre y desarrollo, en los talleres de acercamiento a la lectura pensados para familias con bebés, niños y niñas pequeños, pero también podemos propiciarlos en casa.

Si bien el libro como objeto o la lectura es algo que los adultos queremos incentivar en las infancias y que decidimos ofrecer y promover, creo que si dejamos al alcance de los niños y niñas, en sus espacios de juego, los libros y estamos ahí para acompañarlos cuando quieran explorar un libro, cuando nos demuestren interés en que les leamos o para guiarlos en cómo se usa ese objeto, entonces todos disfrutaremos de esos hermosos momentos de lectura libre, también en casa. 

Desarrollo del movimiento y del lenguaje

Propiciar estos momentos de lectura libre, es decir, de movimiento y juego libre con la exploración de libros acompañados por un adulto en un espacio cuidado y seguro tiene beneficios, no solo en el desarrollo motor, sino también en el desarrollo del lenguaje. 

El lenguaje es movimiento, es exploración de los sentidos, por eso propiciar un espacio donde los niños y niñas puedan tener movimiento libre y promover que tengan un óptimo desarrollo sensomotriz es fundamental para que desarrollen el lenguaje.   

¿Sabías que el movimiento de los dedos tiene un efecto directo sobre el desarrollo del lenguaje? Tamara Chubarovsky explica que cuando los niños aprenden destrezas con los dedos, como cuando aprenden a tejer o enlazar, se llevan a cabo determinados procesos entre el cerebro del niño y sus manos, pero también entre los movimientos de las manos y el cerebro; y estas conexiones son las que tienen una relación directa con el lenguaje, incluso existen movimientos específicos que ayudan a la producción del sonido de cada letra.

El movimiento, las experiencias sensoriales reales, el despliegue del lenguaje y la interacción con el medio social son los que hacen que las redes neuronales maduren y el cerebro esté óptimo para el aprendizaje. Además el cerebro necesita que todo esto se dé en un ambiente distendido, relajado y agradable.

En el juego libre están todos los ingredientes: movimiento, experiencias sensoriales reales, interacción social, ambiente seguro, relajado y agradable, confianza. Y también están esos ingredientes en otras actividades propias de la infancia, como: escuchar cuentos, cantar, hacer rimas con movimiento, entre otras.

¿Cómo acompañar y promover estos espacios?

Para que se dé la lectura libre, es muy importante que los niños y niñas tengan los libros a su alcance y los puedan agarrar cuando quieran, sin limitaciones como pensar en si los van a ensuciar o querer morder o hacer una torre con ellos, para eso presentaremos libros de un material y formato adecuado para este tipo de juego, en un tamaño y formato manuable para su etapa del desarrollo.

Así es que los niños y niñas, en estos espacios, acompañados por un cuidador, además de familiarizarse con el objeto libro, pondrán en juego la exploración visual, la exploración sensorial, la posibilidad de elegir, la coordinación y los modos de leer, ya que podrán poner en relación lo que ven con lo que escuchan (cuando nos vean leer). 

Los niños entienden más de lo que pueden expresar, porque así también se da el desarrollo del lenguaje, desde la comprensión hacia la expresión, entonces pueden leer la secuencia de imágenes o interpretar las imágenes aisladas.

Siempre digo que para enseñarles a leer debemos hacerlo leyéndoles. Entonces cuando nos demuestren interés por el libro y nos pidan que les leamos o lo miremos con ellos, podremos detenernos en una imagen, tocar o interactuar si el libro presenta, por ejemplo, texturas o solapas que se levantan, o nombrar lo que vemos o hacerles preguntas y favorecer la observación y el diálogo sobre el libro o cantar una canción con las imágenes. 

Leyéndoles les damos nuestro ejemplo de lectura y así empiezan a asociar los libros con un momento afectivo, de encuentro; se empiezan a relacionar con los libros de forma positiva, desde el disfrute.

Libros para dejar en su espacio de juego

Te dejo una lista de las características principales de los libros que puedes dejar en su espacio para la lectura libre. Libros para explorar con todos los sentidos, libros para jugar, mordisquear y disfrutar:

  • Libros de tela.
  • Libros de hule para usar en el agua, a la hora del baño.
  • Libros con texturas.
  • Libros con títeres.
  • Libros de cartoné, de hojas duras y gruesas.
  • Libros de cartoné chiquitos que puedan manipular fácilmente, con los que puedan armar torres y construir, libros-cubo.
  • Libros con ventanitas y solapas, desplegables, con una solapa que gira, libro con espejo.
  • Libros de actividades, busca y encuentra, con velcro, con solapas que se deslizan. Para dibujar y borrar.
  • Libros para pintar.
  • Revistas que se puedan rasgar y arrugar.

Entonces el juego libre y el acercamiento a la lectura están intrínsecamente relacionados en la conexión que tienen el desarrollo del movimiento y de los sentidos con el desarrollo del lenguaje. 

Por lo tanto la lectura libre sería esa lectura espontánea que realiza el niño al acercarse a mirar un libro que está a su alcance y forma parte de los materiales de ese espacio seguro de juego. 

Esa lectura la va a hacer desde su propio desarrollo motriz, quizá use el libro dentro de su juego para armar algo, o se lo ponga en la cabeza o quiera sentarse sobre él, llevárselo a la boca, explorarlo con sus pies y manos, quizá intente pasar las páginas e imitar la forma de leerlo que tengan los adultos que lo cuidan, también puede pasar que nos invite o nos pida que se lo leamos y así desde un acompañamiento respetuoso y paciente le iremos brindando esos momentos de lectura juntos, siguiendo su interés y su ritmo.  

 

@mama_lee_libros.uy|María Valeria Schiappapietra |